Los libros electrónicos han llegado para quedarse. Cada vez es más cómodo leer y transportar toda nuestra librería en un dispositivo pequeño, plano, ligero y cómodo para la vista. Y no sólo lee libros, también puede resultar útil y cómodo para lectura de ediciones digitales de periódicos o revistas. Por ejemplo, si tienes un Kindle, conectándolo a través de la red de Amazon, funciona con la tecnología 3G de un smartphone y descarga datos a gran velocidad, almacenándolos en su memoria y teniéndolos listos para leer en cualquier parte.

Y hablamos de Kindle, ¿por qué? Por que Kindle llegó antes, antes que Sony Reader, antes que Papyre y que Nook, y a lo largo de estos años ha ido actualizando y modernizando su familia de libros electrónicos hasta sacar una cuarta generación de Kindle, a la que realmente ningún otro libro electrónico, al menos hasta la fecha, hace sombra.

Para los escépticos que todavía no creen en la revolucionaria tecnología que Amazon ha desarrollado para su Kindle y que piensan que leer en un dispositivo móvil como éste puede ser perjudicial, hay que señalar que el Kindle se lee como el papel, sin reflejos incluso a plena luz del sol, que no tiene un sistema de iluminación propio como los móviles y que puede almacenar hasta 1.400 libros que se pueden descargar de su amplísimo catálogo por menos de 6 euros. Kindle es transportable, tiene un texto nítido y completamente ajustable a las necesidades visuales de cada usuario, es más fino que un lápiz y tiene WiFi integrada, para conectarlo en casa y acceder fácilmente a libros y a cualquier tipo de contenido.